Más de 40 jóvenes participaron en el primer Festival de Canto (Festival de la Canción) organizado por el Distrito de Verapaz del Norte en Guatemala.
El evento, además de ser un concurso vocal, también fue un tiempo de aprendizaje, adoración y consagración al Señor. Los adolescentes y adultos jóvenes con una pasión por el servicio a través del canto, ya sea individualmente o en grupos, fueron invitados al evento por el programa de la Juventud Nazarena Internacional (NYI) del distrito.
El festival se celebró a fines de octubre y tenía varios objetivos. Uno de ellos fue compartir el talento vocal de los jóvenes. Otro objetivo importante fue preservar los himnos que han sido parte de la liturgia para muchas generaciones de nazarenos. Los organizadores de eventos también capacitaron a ministros de adoración a través de una serie de talleres.
Los organizadores enfocaron los talleres alrededor de la visión del distrito, que es «Ser discípulos, hacer discípulos». Muchos de los talleres se concentraron en enseñar a los jóvenes a cantar y alabar a Dios con ese propósito a la vista.
Se ofrecieron un total de cinco talleres, incluida la integridad de un adorador, el perfil del ministro de alabanza y la teología detrás de las canciones.
Para mí, [el evento] fue una gran bendición. Lo que más me gustó fue el taller ‘La Integridad de un Worshiper’, dijo Abimael, uno de los participantes. Como ministro de adoración, ahora tengo una nueva perspectiva sobre lo que debería ser un adorador.
Al evento asistió el cuarteto Verbo de la Iglesia del Nazareno San Marcos en San Juan Chamelco, Guatemala. Además, un cuarteto de pastores del distrito actuó.
Durante la ceremonia de cierre, los participantes fueron presentados con un diploma, y fueron invitados a consagrar sus vidas al servicio del Señor. El servicio incluyó Comunión, que fue liderado por el superintendente de distrito, Francisco Cho.
Fue bueno aprender y saber que no solo debemos cantar a cantar o sentir emoción durante un momento sino que a través de la alabanza, adoramos y edificamos la vida de cada oyente, dijo un participante llamado Marvin.
