Un equipo de la Iglesia del Nazareno Lebueg se convirtió en el primer Equipo de Misiones de Filipinas en participar en misiones interculturales dentro del Área Southeast Asia, específicamente en Tailandia.
El reciente viaje del equipo a Tailandia marcó un paso crucial en el creciente compromiso de la iglesia de servir a las comunidades más allá de sus fronteras.
El equipo de 10 miembros, liderado por Joven Laroya, estaba compuesto por voluntarios dedicados del Distrito Philippines-Luzon. Juntos, se embarcaron en un viaje de fe, servicio e intercambio cultural, siendo su misión compartir el amor de Cristo a través de la educación, la construcción de relaciones y la extensión entre diversas comunidades.
Durante una semana, el equipo facilitó lecciones del idioma inglés y la interacción con la comunidad en cuatro iglesias en Tailandia, cada una con oportunidades únicas de ministerio:
- – Bangchalong – New Creation Center: aquí, el equipo enseñó a niños de la diáspora de Myanmar, equipándolos con habilidades básicas de inglés esenciales para navegar su nuevo entorno y expandir sus oportunidades.
- – Bangkok First Church Preschool: el equipo de misiones fomentó el amor por el aprendizaje entre los niños en edad preescolar al establecer una base sólida a través del juego, actividades atractivas y canciones.
- – Iglesia del Nazareno Oikos: en esta iglesia vibrante y creciente, los miembros del equipo enseñaron inglés y compartieron mensajes de esperanza, aliento y fe.
- – Iglesia del Nazareno Thai Pathana: en este entorno único y diverso, el equipo participó en la extensión educativa, ministrando a niños de orígenes musulmanes con compasión y respeto.
El viaje de misiones se convirtió en más que una experiencia de enseñanza: evolucionó en un intercambio mutuo de culturas, fe y amistad. A través de la risa, la narración de historias y el juego colaborativo, el equipo y las comunidades locales formaron vínculos que trascendieron las diferencias lingüísticas y culturales.
«Imelda y yo hemos estado observando a muchos de nuestros jóvenes en Lebueg y otras iglesias locales que abandonan Filipinas en busca de empleo», dijo Laroya. «Muchos de ellos se convierten en inactivos en su vida de la iglesia. Este viaje de misiones fue una oportunidad de despertar su llamado: servir a Dios incluso mientras se trabaja en el extranjero».
Cuando el equipo regresó a casa, llevaron no sólo recuerdos sino un sentido renovado de llamado y propósito. Se espera que las semillas de esperanza, comprensión y discipulado plantadas durante este viaje de misiones florezcan, fortaleciendo los lazos entre las comunidades nazarenas filipina y tailandesa, y allanando el camino para futuras asociaciones interculturales.
«Si pueden integrar su empleo con la participación activa en las misiones de la iglesia, tanto en su lugar de trabajo como en sus iglesias de origen; entonces hemos logrado empoderarlos, para que vivan su fe donde quiera que estén», dijo Laroya.
La Iglesia del Nazareno Lebueg está comprometida a expandir su extensión en todo el Área Southeast Asia, continuando su labor como un faro de amor, servicio y fe en la acción.
