Oaxaca es una de las muchas comunidades afectadas por la crisis que la pandemia de COVID-19 ha traído consigo. Según el liderazgo del distrito de Oaxaca, muchas personas han perdido sus trabajos, hay escasez de alimentos y las personas están experimentando miedo y la angustia.
Muchas iglesias están pastoreando a sus congregaciones de nuevas maneras creando transmisiones en vivo y giras virtuales además de abrir nuevos canales de comunicación. Una serie de iglesias también han decidido movilizar y extender sus manos con disposiciones para aquellos que más lo necesitan.
Los miembros de la Primera Iglesia de la Nazarena en Oaxaca comparten desayunos los martes y los viernes con personas en su comunidad.Además, la Iglesia de la Nazarena en Etla ha estado compartiendo alimentos con más de 150 personas durante la semana.
La iglesia no se detiene, dijo Josué Barrera, pastor de la Iglesia del Nazareno Etla. Continuamos avanzando y creyendo que Oaxaca, México y el mundo, lo serán para Cristo.
Además, la pequeña iglesia de Córdoba entregó paquetes de alimentos a personas en la necesidad.
Otra iglesia en la movilización es el Centro de Alabanza y Proclamación. La iglesia decidió usar sus recursos para comprar y entregar 3,000 paquetes a familias, y también distribuyeron más de 3,000 comidas a las personas más afectadas en la comunidad.
La Iglesia de la Nazarena en Pueblo Nuevo usó sus propios recursos para preparar más de 1,000 comidas que se distribuyeron en diferentes partes de su comunidad.
Tomamos la decisión de no enfocarnos en nuestras necesidades sino en enfocarnos en las necesidades de otros y dar, dijo Elías Betanzos, superintendente del Distrito del Noroeste de Oaxaca. No porque estemos sobrecargados sino porque sabemos que la generosidad es bendecida, tanto para el que da como para el que recibe.
