Ministerio tipo cafetería en Australia ofrece un espacio para fomentar el espíritu comunitario
En la ciudad rural de Maryborough en Queensland, Australia, The Chatterbox ofrece un lugar acogedor para que las personas se relajen disfrutando de un té, café, pasteles y otros postres, todo con el objetivo de crear tiempo y espacio para desarrollar un espíritu comunitario.
La congregación Richmond Street Community Church of the Nazarene comenzó este ministerio en 2015. The Chatterbox abre durante dos horas y media todos los jueves por la mañana mientras opera el mercado de agricultores de la localidad como un servicio voluntario para su comunidad local de 27 000 personas.
The Chatterbox comenzó en un momento desafiante para la iglesia Richmond Street. En 2013, la iglesia no tenía pastor y solo quedaban unos pocos miembros.
“Fue después de una temporada de mucho desánimo en Richmond Street por las cosas que estaban sucediendo que prediqué 'Ustedes son la luz del mundo' [Mateo 5: 14-16]”, dijo Cameron Batkin, pastor de la iglesia Richmond Street Community. “Hice la pregunta de que si cerrábamos las puertas y nos íbamos, ¿alguien notaría que un día fuimos una iglesia? Eso envió a Naree Horne, uno de los miembros de nuestra junta, a un tiempo de oración. Aproximadamente tres meses después, en una reunión de la junta alrededor de la mesa de la cocina, Naree compartió una visión de lo que se llegaría a convertir en Chatterbox".
La iglesia se inspiró en una visión y un deseo de conectarse con la comunidad local. Naree apareció con una tetera eléctrica (cafetera) y un pastel que compró en un supermercado local.
“Anticipamos que iba a ser algo pequeño y que quizá solo unas 3-4 personas se aparecerían por la mañana”, dijo Batkin. “Abrimos el 26 de marzo de 2015, y en aproximadamente un mes nos visitaban unas 40 a 80 personas a la semana”.
Este ministerio sirve como un lugar de reunión habitual para personas con diversas discapacidades, madres jóvenes y sus hijos, hombres mayores separados de sus familias, personas sin hogar y otros. Si bien es un ministerio de la iglesia, Batkin cree que el enfoque no tan “directo” del ministerio ha ayudado a las personas a sentirse cómodos con un lugar de reunión patrocinado por la iglesia.
“Queremos que vengan a la iglesia”, dijo Batkin. “Pero estamos haciendo esto porque sentimos que es lo que debemos hacer en lugar de tratar de armar algo solo para el domingo. Se trata de que seamos fieles".
A lo largo de los años, The Chatterbox ha recibido varios premios comunitarios y ha aparecido en el periódico local. Además, el gobierno del estado de Queensland ayudó con algunos fondos que permitieron a la iglesia instalar una cocina y agua potable.
Poco después de celebrar su quinto aniversario de ministerio, la pandemia mundial COVID-19 obligó a The Chatterbox a poner una pausa temporal.
"No podemos reunirnos debido a las restricciones actuales, así que nos aseguramos de parar y saludar nuestra familia de Chatterbox cuando los encontramos mientras estamos fuera de casa".
A pesar de los desafíos, el equipo de Chatterbox proyecta optimismo sobre lo que Dios está haciendo.
“Cada semana es diferente”, dijo Batkin. “Una de las cosas interesantes es que Dios siempre ha provisto. Tenemos algunas opciones [de comida] todas las semanas, pero a veces, justo antes de que abramos o justo después, alguien trae al azar un pastel recién horneado o algo para compartir. Nunca nos hemos quedado sin comida, incluso cuando pensamos que será escasa. Siempre tenemos suficiente. El mayor desafío para nosotros es permanecer en las manos de Dios y ser fieles al llamado de servir a nuestra comunidad”.