Familia en Costa Rica practica la generosidad después de recibir ayuda por COVID-19
Cuando la pandemia de COVID-19 comenzó a extenderse a Costa Rica, una iglesia local desarrolló una iniciativa llamada Ayuda Conmigo para ayudar a las familias afectadas por la crisis.
El proyecto fue un esfuerzo conjunto entre los miembros de la Iglesia del Nazareno los Ángeles y los residentes locales, ya que donaron a un fondo para ayudar a las familias necesitadas.
Una de las familias que recibió ayuda fue un joven y su madre, Pablo y Yessenia. Yessenia trabajó anteriormente como proveedora de servicio de banquetes, pero debido a las restricciones de la pandemia y el aislamiento, ya no pudo trabajar.
Gracias a la contribución financiera de Ayuda Conmigo, pudieron sostenerse durante las primeras semanas. Con los fondos proporcionados por la iglesia y otras donaciones que recibieron, decidieron iniciar una pequeña empresa de comida rápida en casa, Comida Rápida Yes. El nuevo negocio ha prosperado y es una nueva fuente de apoyo para la familia de Yessenia. Poco tiempo después, decidieron dar a la iglesia una parte de los ingresos para ayudar a otras familias.
"Dios ha sido tan bueno con ellos", dijo Andrés Fernández, pastor de la Iglesia del Nazareno los Ángeles. "Esta familia que al principio de la pandemia necesitó una inyección económica de parte de Ayuda Conmigo, solo algunas semanas más tarde estaban donando dinero del fruto de su negocio para que otras familias puedan ser beneficiadas".
Pablo y Yessenia pudieron contratar a un joven de la iglesia que perdió su trabajo para que él también pudiera tener un ingreso para su familia.
"Es hermoso ver como una familia que recibió la ayuda económica, fue proactiva logrando multiplicar ese dinero, hasta el punto de ahora poder dar de sus recursos para ayudar a otros", dijo Fernández.
El pastor Fernández cree que esto muestra la combinación de una iglesia preocupada por la comunidad, una familia que toma buenas decisiones, más la ayuda del Señor. Lo llamó una ecuación maravillosa para el desarrollo integral de las personas y la extensión de la misión de Cristo en la tierra.
"Agradecemos a Dios por familias como la de este joven y su madre, que demuestran que Dios continúa multiplicando talentos a aquellos que se pusieron a trabajar", dijo Fernández.