Iglesia en Costa Rica innova a través de un modelo urbano/orgánico
La Iglesia del Nazareno Sublime Gracia celebró su organización oficial en el Distrito Central de Costa Rica el 7 de febrero de 2021. La iglesia tiene una peculiaridad en el sentido de que no cuenta con una instalación física.
Según el fundador y pastor principal Elimelec Juantá, la flexibilidad de la iglesia en los servicios presenciales y virtuales les ha permitido continuar durante el tiempo de pandemia, discipulando y recibiendo nuevos hermanos y hermanas en Cristo.
“Al no tener un edificio para la iglesia, los hermanos y hermanas han entendido que nuestra experiencia cristiana es las 24 horas del día, dondequiera que estemos, y los servicios a través de la plataforma Zoom han sido el logro del enfoque dual de nuestra iglesia”, dijo.
La iglesia actualmente tiene tres reuniones virtuales. Otras reuniones como grupos pequeños se realizan en hogares en diferentes horarios y según sus necesidades. También tienen una reunión presencial mensual en la que todos se reúnen para celebrar bautismos, recepción de nuevos miembros y santa cena. También dijo que ahora su objetivo es desarrollar otra iglesia rápidamente, porque según él, "una iglesia produce otra iglesia".
La iglesia tiene lo que Juantá llama un formato "urbano/orgánico". La clasificación urbana reconoce el enfoque de la iglesia en llegar a las personas de la ciudad capital de Costa Rica, donde hay cada vez más personas, incluidos los extranjeros, y "orgánico" significa que la iglesia no tiene un lugar físico.
Juantá dijo que esta iglesia nació en su corazón y el de su familia hace 11 años durante una de las muchas tardes en que se reunieron con sus amigos y ministros nazarenos Sharon, Mario y su hija Valeria Vargas mientras tomaban café, escuchaban música y conversaban. Empezaron a soñar con iniciar un ministerio urbano y orgánico para predicar la palabra de Dios.
"Sabíamos que Dios había puesto este desafío en nuestros corazones", dijo Juantá.
El 5 de febrero de 2017, en el Hotel Radisson de San José, Sublime Gracia abrió sus puertas. Ese primer servicio de adoración le dio la bienvenida a 19 personas. Ahora tienen un grupo de casi 100 integrantes.
“Dios siempre ha sido fiel”, dijo Juantá. “Mi esposa, Crhis Mesén, y mis hijos, Caleb e Isabela, han participado activamente desde el principio, junto con otros familiares además de la familia Sublime Gracia. La fidelidad de Dios se manifiesta en todo, especialmente en los nuevos creyentes”.