Highland Park Church of the Nazarene distribuyó 30 000 libras de frutas y vegetales a su comunidad el Viernes Santo gracias a las donaciones de varios agricultores en el área de Lakeland, Florida.

Los agricultores generalmente envían sus productos a restaurantes y negocios locales, muchos de los cuales están experimentando una menor demanda o incluso están cerrados debido a la pandemia de COVID-19. En cambio, los granjeros donaron los productos al ministerio de la iglesia Combee Connection y a otros cuatro ministerios locales.

Los miembros de la iglesia crearon una distribución de autoservicio, distribuyendo los alimentos a 750 familias.

“Siempre me anima la cantidad de personas que desean vivir una vida generosa, incluidos nuestros buenos agricultores aquí en Florida central y las buenas personas de Highland Park que dieron su tiempo y trabajaron duro para llevar esta comida a las personas que más la necesitan”, dijo Brett Rickey, pastor principal de Highland Park. "Los beneficiarios de este milagro dan testimonio de que Jesús realmente forja un camino donde parece que no lo hay".

Cada semana, Combee Connection proporciona alimentos y otros suministros a las personas que viven en el área de Combee, un asentamiento en North Lakeland que tiene una alta tasa de pobreza, drogadicción y personas sin hogar.

Una vez al mes, Highland Park celebra una reunión en Combee para que la gente obtenga comida y ropa y escuche un mensaje de la Palabra. También proporcionan transporte a la iglesia desde Combee para sus servicios semanales normales, ya que muchas personas no tienen automóviles y la iglesia no les queda cerca.

Mientras la iglesia reservaba 75 dotaciones de alimentos para clientes habituales del ministerio de Combee Connection, las donaciones del Viernes Santo estuvieron abiertas a todas las personas del área de Lakeland.

"Fue una experiencia increíble el Viernes Santo cuando la gente conducía para recibir alimentos buenos y saludables para sus familias, muchos de los cuales actualmente no tienen trabajo", dijo Becca Leeseberg, directora de comunicaciones de Highland Park Church.