Una iglesia de Alaska abre un parque inclusivo para discapacitados y personas con necesidades especiales
Palmer First Church of the Nazarene, en Alaska, ha inaugurado recientemente un parque de 9,000 pies cuadrados totalmente accesible e inclusivo para discapacitados y personas con necesidades especiales y sus familias. El parque es otro nivel de conexión entre Palmer First y su comunidad.
El parque cuenta con baños accesibles para discapacitados, un pabellón y juegos infantiles inclusivos. Su superficie permite que personas con sillas de ruedas, andadores o muletas puedan recorrerla fácilmente. Incluso incluye un tablero de comunicación que permite a los visitantes no verbales comunicarse entre sí.
Una de las piezas más populares del parque infantil es el "We-Go-Round", que tiene una base de transición que permite jugar a personas en silla de ruedas.
En 2021, el pastor principal Joseph Parreira empezó a preguntarse: "¿Dónde no está comprometida la iglesia?" Al principio, se centró en las personas con necesidades especiales y discapacitadas; pero, con el tiempo, amplió su campo de acción.
"Era algo más que una persona con discapacidad o necesidades especiales", afirma Parreira. "También se vieron afectados sus seres queridos y cuidadores".
Una de las primeras formas en que Palmer empezó a llegar a esta comunidad fue a través del programa "Night to Shine" (Noche para brillar), una experiencia de baile de graduación para estudiantes con necesidades especiales.
La primera edición fue un gran éxito; pero el hecho de que sólo fuera una vez al año dejó a los miembros de la iglesia con la impresión de que necesitaban hacer más.
"Sabíamos que teníamos algo", dijo Parreira. "Teníamos que hacer algo que creara comunidad con regularidad".
Luego, vino la idea del parque. Amy O'Brien, directora administrativa de Palmer First, se hizo cargo del proyecto, consultando a padres, profesionales y otros miembros de la comunidad para ayudar a desarrollar un parque que fuera un verdadero activo comunitario.
La gran inauguración del parque tuvo lugar el 16 de agosto, con la presencia de más de 450 miembros de la comunidad que asistieron a la ceremonia de corte de la cinta. Parreira calcula que más de 40 personas visitan el parque en cualquier momento.
Un beneficio inesperado del parque es el compromiso de la comunidad de ancianos. La Asociación Nacional de Recursos para el Cuidado de Niños calcula que el 40% de los abuelos cuidan de sus nietos. La facilidad de acceso a todos los equipos del parque infantil permite a los abuelos interactuar con sus seres queridos.
Como el parque está en la propiedad de la iglesia, Parreira dice que es una "rampa de acceso" para que los visitantes se unan a la iglesia.
"Cuando la gente sabe que te preocupas, se crea la oportunidad de que se preocupen por lo que tú sabes", afirma Parreira. "Y, en este caso, sabemos que Dios les ama y quiere dar a conocer ese amor".