En enero, un equipo de misiones compuesto por iglesias de los Estados Unidos y un equipo de misiones de la Iglesia del Nazareno Monte Sinaí en Quito, Ecuador, colaboraron para completar una jornada de trabajo en un pueblo en Imbabuela, Ecuador, a 75 kilómetros de Quito.

Para motivar y demostrar el amor de Dios a los habitantes de la comunidad, los equipos se unieron para celebrar un día de trabajo. Para el evento, los asistentes recaudaron dinero por su cuenta. Reunieron cestas llenas de alimentos y juguetes que se distribuyeron a los miembros de la comunidad utilizando donaciones de los miembros de la iglesia local y de los Estados Unidos.

El pastor Hernán Puga y la presidente de MNI de la iglesia Monte Sinaí, Bianca García, desafiaron a la congregación a realizar este viaje misionero. El equipo de misiones adoptó el nombre de Matt 25 basándose en Mateo 25, donde Jesús habla de hacer el bien "aún a los más pequeños".

"Lo que nos impulsa es el amor de Dios por los niños, los jóvenes y los ancianos", dijo Puga. “Ojalá tuviéramos más recursos, pero sabemos que Dios puede hacer mucho con lo poco que tenemos”.

Monte Sinaí apoya misiones nacionales e internacionales. La iglesia recoge una ofrenda misionera una vez al mes para ayudar en los esfuerzos misioneros. La iglesia se dio cuenta de que otra oportunidad había surgido de Dios cuando escucharon que un equipo de misiones nazarenas de los Estados Unidos estaba considerando viajar con ellos a esa comunidad.

“Nos consideramos una iglesia misionera”, dijo Puga. "Tal vez no podamos enviar un misionero al extranjero; pero podemos hacer misiones en nuestro propio país y apoyar a las misiones dando”.

García se inspira en el entusiasmo de los participantes para ir en este viaje misionero. Ella creyó que tanto los miembros de la congregación como los de la comunidad se beneficiarían de este viaje misionero.

"Nuestra motivación es compartir con la gente sobre el evangelio", dijo García. “Queremos que la gente sepa que no está sola. Esperamos que a través de esta misión, se levanten más líderes y el reino de Dios continúe creciendo en más lugares indígenas, en toda nuestra nación y en el mundo”.

El domingo, miembros de la comunidad, miembros del equipo de Estados Unidos y miembros de Monte Sinaí adoraron juntos. El mensaje fue predicado por el pastor Puga, quien desafió a la audiencia a ser la iglesia en nuestro mundo y a amar a las personas.

"Cuando amamos a Jesús, el amor fluye [a los demás]", dijo Puga. “Jesús quiere que seamos como Él. Él abrazaba a los niños y a los ancianos, y la gente venía a Él. Tú tienes a Jesús en tu corazón, así que estamos llamados a amar a los demás”.