El huracán John azotó la costa sur de México el 23 de septiembre como tormenta de categoría tres. Después de tocar tierra al sur-suroeste de Marquelia, en el estado de Guerrero, el huracán John se debilitó hasta convertirse en tormenta tropical, provocando fuertes lluvias, inundaciones y deslizamientos de tierra.

El Coordinador de Ministerios Nazarenos de Compasión (MNC) de México, Cutberto Tenorio, dijo que las áreas más afectadas por las inundaciones son Acapulco, Costa Chica y Tierra Caliente, donde muchas familias fueron evacuadas y reubicadas en refugios establecidos por el gobierno.

“La escasez de agua y la inestabilidad del servicio eléctrico son las principales necesidades”, dijo Tenorio, añadiendo que hay una gran necesidad de alimentos, ropa y botas para moverse a través del agua y el barro.

La Iglesia del Nazareno en Acapulco y Ciudad Altamirano se movilizaron para responder a la crisis a través de MNC.

Equipos de voluntarios, entre ellos jóvenes y adolescentes, rehabilitaron casas después de limpiarlas, quitar barro y escombros, y desinfectar paredes y pisos. También proporcionaron a las familias afectadas paquetes de alimentos, ropa y agua purificada.

“Han habido varias comunidades que se han apoyado entre sí”, dijo Tenorio. También dijo que todavía existen desafíos esenciales con respecto a cómo la iglesia responderá a las diferentes necesidades.

El coordinador regional de MNC de Mesoamérica, David Campos, pidió oración por los afectados, incluidos aquellos que continúan respondiendo y siendo las manos y los pies de Jesús.

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--Iglesia del Nazareno Región Mesoamérica.