Inala Church of the Nazarene era una pequeña congregación de alrededor de 15 personas en 2016. Muchos eran viajeros que vivían fuera de la comunidad local, que se había vuelto indiferentes a la presencia de la iglesia y a la gracia salvadora que podían experimentar dentro. La iglesia y sus miembros no se dieron por vencido y renovaron su compromiso de demostrar amor.

La iglesia ahora es un reflejo vigoroso y relevante de la multiculturalidad en la comunidad local. Hoy, demuestra una perspectiva única de la promesa del reino de Dios a todas las personas de diferentes naciones e idiomas que se reúnen a adoran. La transformación de la iglesia comenzó a experimentar la transformación mientras se acercaba a su 50 aniversario. La iglesia cambió su nombre a Place of Peace Church of Nazarene (Inala significa lugar de paz en el idioma aborigen). Esta acción representa la búsqueda de una vida santificada que se expresa a través de la relación correcta con Dios y los demás. También adoptaron una nueva declaración de misión: "Abrazar y habilitar a todas las personas con esperanza, dignidad y paz".

La iglesia está comprometida a orar a medida que comienza a interactuar en la comunidad. Un grupo cortó el césped, recogió basura, lavó autos, compartió comida y ropa, y organizó barbacoas comunitarias y celebraciones navideñas. La iglesia también extendió su compañerismo a la comunidad sin esperar nada a cambio. Hicieron conexiones con las escuelas en el vecindario y las organizaciones de servicios comunitarios locales, lo que generó oportunidades que impactan las vidas de los estudiantes, el personal y la comunidad circundante. Los vecinos se dieron cuenta y comenzaron a entablar relaciones con los miembros, y la comunidad local comenzó a formar parte de la iglesia.

Un domingo por la mañana, entró un refugiado recientemente reasentado de la República Democrática del Congo. Hablaba muy poco inglés. Si bien la iglesia no conocía su idioma ni su cultura, simplemente lo recibieron con la hospitalidad comunitaria del amor de Dios. Diferentes culturas comenzaron a aprender unas de otras a medida que más refugiados africanos reasentados hicieron de Place of Peace su hogar.

Después de superar las barreras del idioma y la cultura, la pandemia de COVID-19 presentó nuevos desafíos para Place of Peace. Sin embargo, la iglesia vio esto como una nueva oportunidad para mostrar el amor de Dios de manera creativa. Cuando se cancelaron las actividades de Semana Santa debido a las restricciones de COVID-19, la iglesia entregó hojas de palma a los hogares de los feligreses y los alentó a celebrar juntos durante la transmisión en vivo. Cada mañana de Semana Santa, la iglesia llevó el mensaje de Pascua a los hogares individuales locales entregando un huevo sorpresa con un mensaje adentro.

Se entregaron postales que incluían información de ayuda para hacer compras o para ofrecer un oído atento para platicar a medida que continuaban las restricciones. La iglesia espera compartir la presencia amorosa de Dios de manera creativa durante este año desafiante. A medida que las reuniones de adoración volvieron lentamente a la normalidad, la iglesia ha visto caras nuevas de más naciones, incluidas Papúa Nueva Guinea y Brasil.

“[Estamos] abrazando nuestra identidad como un lugar de paz donde el amor de Dios y las expresiones renovadas de esperanza, dignidad y paz se pueden experimentar en cada nación y lengua”, dijo Jade Chapman, co-pastor principal. "Hemos experimentado la verdad bíblica del amor conquistador de Dios".

--Iglesia del Nazareno Región Asia-Pacífico